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domingo, 26 de septiembre de 2010

Ciencia y medicina

El intelecto sería lo fundamental

ALGUNOS CIENTÍFICOS PIENSAN QUE LAS MANOS PODRÍAN DESAPARECER EN EL FUTURO

Primero sería el dedo meñique, luego el anular, el medio, el pulgar y el índice; finalmente desaparecerían las manos y los brazos.


Por Napoleón Bonaparte



Las manos forman parte de las extremidades del cuerpo humano, y comprenden desde las muñecas hasta la punta de los dedos inclusive, según la Real Academia Española, el lenguaje corporal es todo lo que transmitimos de forma no verbal, las manos son fundamentales, sus movimientos pueden delatar los sentimientos o percepción acerca de la persona con quién estamos interactuando.

Especialistas afirman que los procesos comunicacionales personales están representados de la siguiente forma: el 55% de las comunicaciones personales se hacen por medio del lenguaje del cuerpo; el tono de voz representa el 38% y solamente el 7% restante está constituido por las palabras.

Los políticos han comprendido cuán importante es el lenguaje corporal y lo emplean para enfatizar y dramatizar sus discursos, y también para dar de sí la imagen de una personalidad confiable. El presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt tenía un control de su personalidad, a pesar de ser lisiado, nunca permitió que su cuerpo apareciera en una posición que demostrara debilidad. Conocía el impacto del lenguaje corporal para trasmitir una imagen de sí mismo controlada y segura.

En Chile, el Presidente Ricardo Lagos también lo sabe, en 1988 durante la dictadura militar, en el programa político de cara al país, conducido por la periodista Raquel Correa, el entonces líder opositor, se dirigió al General Augusto Pinochet señalándolo con el dedo, a la vez que indicaba, que en octubre debería responder entre el sí o el no. Es probable que nadie recuerde las palabras de Lagos, pero sin duda todos recuerdan el dedo acusador.






El Presidente Lagos es probablemente, el político con mejor oratoria en nuestro país de los últimos tiempos, sabe acompañar la palabra con gestos, principalmente, de sus manos, abiertas con las palmas extendidas cuando quiere ser confiable, cerradas en forma de puño y firmes cuando quiere mostrar autoridad, reposadas y calmas cuando quiere mostrar serenidad.

Según el sociólogo de la Universidad de Chile y consultor de Katalejo Investigaciones Sociales, Cristóbal Feller, el uso de las manos es fundamental a la hora de dirigirse frente a un público, “los gestos son tan convincentes como las palabras, cuando un político mira hacia adelante con las manos extendidas, presenta un futuro promisorio para los votantes, y es generalmente la parte que saca aplausos durante un discurso”.

Tan importantes son los gestos para Feller, sobre todo de brazos y manos, que recuerda la iconográfica fotografía de Pinochet con los brazos cruzados, manos ocultas y lentes oscuros, “cuando se presentó de esta forma, sin duda lo que quería era infundir miedo en la población, mostrarse como un hombre decidido capaz de cualquier acto, sus brazos cruzados y sus manos ocultas provocan desconfianza hasta en el más confiado, y los lentes… uno a una persona así le teme”.

La fotografía de Pinochet con los brazos cruzados, manos ocultas y lentes negros recorrió el mundo.


EL INTELECTO ES LO PRINCIPAL EN EL SER HUMANO

El uso que se le dio a las manos influyeron de manera directa en la evolución del ser humano, como cazador sostuvo lanzas y cuchillos, como recolector tomo los frutos y sostuvo cestas, como agricultor aró la tierra, sembró y cosechó frutos. Luego cosió cueros, moldeó alfarería y templó metales. Más tarde los obreros dependieron de ellas para operar maquinarias y ajustar piezas.

Para el antropólogo de la Universidad de Chile, Pablo Arriagada el uso de las manos es lo que nos diferencia del resto de los animales, “somos los únicos animales capaces de usarlas con una habilidad motora fina, esto nos diferencia del resto, incluso de los primates quienes no son tan hábiles con ellas, el desarrollo de esta capacidad va acompañado del intelecto humano. Mientras más sencillo su comportamiento, más sencillo el uso de las manos; mientras más sofisticado su comportamiento más sofisticado el uso de las manos”.

Para la preocupación de políticos, el antropólogo continúa con una tesis inquietante, “hoy en el postmodernismo, vemos que las habilidades motores finas de nuestras manos pueden no ser tan necesarias, ahora son máquinas quienes hacen las tareas que requieren de un máximo detalle; robots, computadores, incluso vemos que el mayor genio vivo de raza humana, Stephen Hawking, se comunica sin la necesidad de ellas, sin la necesidad de la voz… Hawking se comunica a través de su intelecto y usa como medio un computador”.

“Vemos que el dedo meñique ha evolucionado, es más pequeño que en nuestros antecesores, luego podría desaparecer el anular, seguirle el medio, y posteriormente el pulgar, para terminar por desaparecer el índice y quedar sin dedos, luego sería probable que desaparezcan las manos y los brazos… al parecer el intelecto es lo que principal en el ser humano”, concluye Arriagada
.

Las manos han sido parte fundamental del ser humano desde su origen, motor de nuestras actividades y fuente de sobrevivencia. Para la mayoría de las personas resulta inquietante pensar, que algún día, podrían dejar de existir, el reinado del intelecto podría estar a la vuelta de la esquina y no volver a sentir nuevamente el calor de una mano amiga ser estrechada con la nuestra.


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