La crisis que viven los penales en Chile
Robinson Pino: “El personal no da abasto en Gendarmería”
Cerca de 300 imputados llegan hasta las 10:30 de la mañana a Rosas 1264. La mayoría –de ellos- por robo o hurto. Y la principal tendencia. Menores de 18 años.
Santiago.- La situación penitenciaria en Chile, es crítica. El personal es insuficiente para cuidar al penal y la población suma y sigue. La tragedia más reciente; la muerte de 81 reos en la Cárcel de San Miguel. Y posterior a esta, una seguidilla de motines que encienden la polémica a nivel de Justicia y social.
Para el Capitán de Gendarmería, Robinson Pino, existen enormes falencias estructurales y asegura que el personal es insuficiente para tantos reos; “contamos con un ascensor para cuatro personas y cuando debemos subir al tercer piso tenemos 80 imputados. Las celdas albergan entre 13 y 15 personas, lo que dificulta atender a los reos cuando hay conflicto entre ellos, pues podríamos poner en peligro nuestras propias vidas. Por lo tanto el personal no da abasto con la población penitenciaria”, concluye Pino.
Para la Asociación Nacional de Oficiales de Gendarmería (ANSOG) la problemática no tiene solución ni a corto ni a mediano plazo. Sin embargo, proponen algunas medidas para evitar un colapso mayor. Siendo la más importante, que las condenas de menos de un año no se cumplan en estos recintos.
Por su parte el Jefe de programación y administración de servicio del Centro de Justicia de Santiago, Marco Lillo, afirma que cerca del 70% de los imputados son menores de edad y llegan por robos de menor relevancia.
“Al Centro de Justicia llegan cerca de mil quinientos casos a la semana. Es decir, 300 diarios aproximadamente. Sin embargo en su gran mayoría son robos con sorpresa, hurto, o situaciones que los imputados saben que no serán procesados, por eso ese tipo de actos delictuales son los más recurrentes en Santiago, llegando casi al 70%”, concluye Lillo.
Sueldos, corrupción y algo más
Robinson Pino, Capitán de Gendarmería, es enfático al asegurar que existe gran cantidad de jóvenes que postulan año a año a la institución. Sin embargo, las remuneraciones siguen siendo el punto flaco para el ingreso de personal.
“Los riesgos que corre el personal día a día, son altos. Y no se pagan con esos sueldos. La remuneración no se nivela con el nivel de riesgo que el funcionario tiene. Los gendarmes no contamos con una asignación de riesgo. Y como bien sabemos la población es casi un 500% más alta que la cantidad de personal. Por lo tanto los riesgos, son mayores acá, que en cualquier otra institución”, aseveró.
Con la muerte de 81 reos en la Cárcel de San Miguel, se han especulado varios casos de corrupción. Además se investiga en la Fiscalía Sur, la hipótesis de la posible ingesta de alcohol durante el incendio de funcionarios de gendarmería. Pero Pino es claro: “La corrupción es un tema relevante. Y nuestra institución hace todo lo posible para que esto no ocurra. Todos los casos que se han conocido, han sido denunciados y los funcionarios han sido apartados de la institución de manera inmediata” dijo.
En Chile hay más de 6 mil personas en la cárcel condenadas a penas inferiores a un año. Las penas tienen como finalidad 3 objetivos: el primero, la seguridad pública; el segundo, el escarmiento para el resto; y por último, la reinserción. Por lo tanto si la investigación, en cualquier caso, dura seis meses y la condena es de ocho, el paso del imputado por la cárcel para cumplir el objetivo principal, ya mencionado, es nulo.
Aquí toma forma la idea de no condenar en estos recintos a imputados, que cumplan condenas de un año, que plantea la Asociación Nacional de Oficiales de Gendarmería (ANSOG). De esa manera a corto plazo se podrían acotar las sobrepoblaciones y los motines que son pan de cada día en estos momentos, en los recintos carcelarios.
_____________________________________________________ Julio Rivera
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